La utilización de la energía solar de baja potencia así como los sistemas híbridos para abastecer de electricidad aquellas localizaciones donde no existe la red eléctrica, ésta es de difícil acceso o se debe generar electricidad a través de grupos electrógenos, hacen de esta modalidad una de las aplicaciones más rentables que a día de hoy se conocen.
Una instalación con baterías genera electricidad por medio de los sistemas renovables comentados anteriormente. Esta electricidad se consume de forma inmediata o puede quedar almacenada en baterías para su posterior uso en el momento que exista demanda. Un adecuado dimensionado y ejecución de la instalación nos permite tener un alto nivel de confort de forma eficiente, limpia, segura y totalmente renovable.
En caso de consumos alimentados con grupos electrógenos, las instalaciones alimentadas mediante baterías nos permiten sustituir total o parcialmente el consumo de energías fósiles como el gas o el gasóleo.
Unas baterías óptimas y su correcto dimensionado nos permitirán amortizar la instalación en un periodo medio en España de 3 a 5 años dependiendo de la zona de irradiación, teniendo hasta 10 años de garantía.
¿Necesita generar energía eléctrica en un lugar aislado?
Aplicaciones:
ARCHISOLAR RENOVABLES ofrece productos para sus instalaciones con baterías, entre las que se encuentran:
- Instalaciones para viviendas
- Instalaciones de bombeo
- Instalaciones en hoteles y albergues rurales
- Instalaciones de respaldo
- Instalaciones de telecomunicaciones y Microredes
- Sistemas de Seguridad
- Instalaciones agrícolas o ganaderas
Adaptamos nuestras baterías a cualquier tipo de necesidad, generando energía eléctrica allá donde las instalaciones eléctricas no ofrecen servicio y garantizando la máxima eficiencia.
Funcionamiento de la energía renovable
La energía renovable genera un tipo de electricidad renovable obtenida a través de la incidencia de los rayos del sol y del viento sobre diversos sistemas, módulos solares fotovoltaicos o eólicos de baja potencia.
Cuando una partícula de luz incide sobre una molécula de éstas células, se libera un electrón. El campo eléctrico causa que el electrón liberado se mueva y genere electricidad. Este efecto es conocido como fotovoltaico.
Para la energía eólica de baja potencia esta misma radiación hace que el viento produzca unas rachas que al contacto con los molinos de viento y su rotor generen corriente. Este es el llamado efecto eólico.
Hay dos formas de utilizar la energía eléctrica generada a partir del efecto fotovoltaico:
- En instalaciones conectadas a red: La energía generada se envía a la red eléctrica convencional para su distribución donde sea demandada, sin baterías.
- En instalaciones aisladas: La energía generada se almacena en baterías para poder disponer de su uso cuando sea necesario.
Esquema básico de funcionamiento de una instalación solar fotovoltaica y eólica.